Ferretería Vilanova tiene sus orígenes en 1980, cuando Juan Vilanova comenzó a vender material de ferretería en su tienda de material de construcción. Con el paso de los años, sus dos hijos, Maria Rosa y Josep, ampliaron la división de ferretería, consolidando la empresa en el sector. En 2007, la familia inauguró una nueva tienda en el polígono de Pollença, con una superficie de 600 m², dedicada principalmente al profesional.