El sector de la ferretería y el bricolaje ha experimentado un crecimiento del 5% en sus ventas este año, según los datos de la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (AECOC). Estas ventas se han visto impulsadas por el e-commerce, que ha entrado con fuerza en el sector de la ferretería y el bricolaje, generando nuevos hábitos de compra en los consumidores.
Las nuevas y constantes demandas de los clientes han provocado que las ferreterías se vean obligadas a evolucionar y adaptarse a las exigencias del mercado. Éstos demandan cada vez más inmediatez, agilidad y especialización en los servicios.
Ya en el 2018 la omnicanalidad ha sido un reto que muchas ferreterías han abordado, como en Optimus. La unificación de los canales online y offline seguirá siendo una prioridad para el mercado del año que viene.
Por otro lado, los consumidores escogen su canal de venta basándose principalmente en la variedad de productos, el precio, la proximidad y la confianza.
Por este motivo, la combinación de la omnicanalidad y la proximidad es un modelo de venta que permite ofrecer un hiperservicio, basado en la rapidez, eficacia y calidad logística. Esta composición consigue integrar los establecimientos y el entorno digital como un solo canal de venta, focalizando los servicios en un único objetivo: atraer a los consumidores y satisfacer sus necesidades.
En la era del nuevo consumidor dinámico, esta unión de fuerzas bajo una misma enseña es un elemento que acerca los puntos de venta físicos de proximidad a los consumidores, en los que recibirán un asesoramiento personalizado.
Esta combinación es uno de los valores propios Optimus que le permiten optimizar sus servicios y generar nuevas experiencias de compra. Con todo, los comercios pueden seguir ofreciendo la misma atención cercana de siempre, mientras se benefician de acciones comunes más eficientes para su negocio que, además, les generan visibilidad y tráfico hacia sus establecimientos
